Capítulo #22



Sofía:

Damon y yo terminamos yendo a otro bar, al parecer fallaría esa noche en cuanto asistencia en la presentación de su amigo. Pedimos una ronda de cervezas y continuamos platicando, ahora sobre su banda, la cual se llamaba Blur, al preguntarle el porqué del nombre se limitó a contestarme “Por la vista borrosa” y ambos reímos.

-Realmente no tiene gran importancia...-comentaba con esa voz pacifica que tenía.
-Me parece un poco extraño...
-¿Por qué?
-Porque... al parecer todas las bandas en el mundo parecen tener un significado filosófico para su nombre.
-Ah, sí... supongo que algo había, debo confesar que estábamos un poco elevados cuando decidimos el nombre, así que cualquier significado que pudo haber existido, se perdió en mi mala memoria- sonrió y ambos tuvimos un momento de silencio compartido y miradas enganchadas.
-¿Y no han tenido otro nombre?- pregunté desviando la vista y él se irguió.
-Antes nos hacíamos llamar Seymour, nos gustaba ese nombre, nos parecía raro...
-Y lo es- Ambos llevábamos las suficientes cervezas encima como para estar más desinhibidos el uno con el otro, entonces supe que lo mejor sería ir a casa, pues sorpresivamente, el cielo decidió rugir.
-¿Lloverá? ¿En serio? ¿De buenas a primeras?- preguntaba bastante extrañado.
-Bien Damon, antes de terminar como perros mojados, deberíamos irnos...
-Maldición, la estaba pasando muy bien- respondió con desánimo.
-Yo también, pero debemos irnos. Ya será en otra ocasión.- Pagamos la cuenta, nos pusimos nuestras chamarras y comenzamos a caminar y yendo a mitad de la avenida, la lluvia comenzó a caer torrencialmente.
-¡Mierda!- gritó él
-¿Por qué justo ahora?
-Ven, rápido...- tomó mi mano y me hizo correr junto con él hasta la acera y una vez ahí correríamos hasta la parada del bus, la cual estaba techada.
Íbamos velozmente hasta allá y yo intentaba correr a paso firme y no terminar vergonzosamente en el suelo y de paso llevarme a Damon conmigo.
Al llegar nos reímos como un par de tontos que se emocionan con la lluvia, pero también porque nos veíamos extraños medio mojados.
-Demonios, odio la lluvia...
-Es una parte vital para...
-Sí, sí señor planeta tierra, sólo fue una expresión- lo interrumpí.
-No debes interrumpir a las personas, es de mala educación.
-Claro...
-Tú te lo buscaste- Y de la nada comenzó a hacerme cosquillas y fue bastante extraño que nos comportáramos de esa manera, aunque tal vez se debía a que nadie más podía vernos. Entonces nos quedamos en silencio otra vez, me recargué en el mupi de aquella parada de autobús y me dediqué a observar la lluvia caer, cuando dirigí la mirada hacia Damon noté que él me observaba con bastante calma; le hice una mueca y él sonrió un poco tímido por haber sido descubierto.

-No me mires así, tú te ves peor- dije y él sonrió un poco.
-Sofía, cualquiera se ve mal junto a ti. Todo el mundo es feo si lo comparamos contigo...
-Muy gracioso...- desvié la vista.
-Lo digo en serio...- se acercó hasta a mí.
-¿Qué cosa?
-Que eres hermosa, Sofía...- ambos volvimos a esa tensión sexual que había entre ambos.
-Pues... gracias
-¿Gracias?- dijo riendo
-Sí. Jamás tendrás un halago de mi parte- él comenzó a reír y apoyó una mano en el mupi, estando justo frente a mí.
-No lo esperaba, eres una chica muy cruel
-Acostúmbrate- seguí bromeando.
-Sin dudarlo- Entonces al mirarlo, un poco confundida, noté que él ya estaba totalmente cerca de mí. Hundió su mirada en la mía y apenas podíamos dibujar pequeñas sonrisas, pero al parecer estaba siendo demasiado para él, pues sin importarle más, tomó mi rostro y me besó. Me besó lenta y apasionadamente.
Al principio me quedé inmóvil al pensar que aquello no tenía que suceder, pero sus labios eran tan cálidos y suaves y su manera de besar algo totalmente nuevo para mí, por tanto, no pude detenerme.

Al sentir que la respiración nos faltaba decidimos detenernos, él apoyó su frente con la mía y podíamos sentir nuestro agotamiento y de pronto, como una fuerte sacudida, la imagen de Noel vino a mi mente. Me alejé de Damon y lo miraba con un poco de pánico y él sólo sonrió; al estar a punto de acercarse de nueva cuenta, el bus llegó y yo me giré.

-Bien, debo irme...
-Pero... sigue lloviendo.
-Es precisamente por eso que debo llegar a casa. Lo siento Damon, pero esperan por mí.
-Sofía... quédate- pidió un poco insistente y me sentí culpable.
-Creo que será otro día, Damon. Gracias por la compañía- sonreí y él me sonrió a medias.
-Está bien. Cuídate y si puedes envíame un mensaje cuando...- el bus estaba por irse.
-Sí, lo haré. Hasta luego Damon- corrí hasta el bus, pagué y tomé asiento hasta atrás.

La cabeza me estallaría en cualquier momento, no podía creer lo que acababa de suceder, pero era aún más increíble el haber pensado en Noel, por lo tanto estaba confundida. Si bien, me gustaba Damon y honestamente, había disfrutado demasiado aquel beso, pensar en Noel me hacía creer que tenía una respuesta a mis problemas.

-¿Qué demonios me sucede? Ya no tengo quince años- susurraba encontrándome de mal humor.

Y como si eso no fuera ya suficiente, aquel estado etílico me hizo tomar una decisión bastante impulsiva: cuando el bus cruzaba por la actual avenida de los Gallagher, pedí la bajada.
El chofer y otras tantas personas me miraban con total asombro al no lograr concebir que bajaría en medio de la avenida en plena tormenta, sin llevar un paraguas o algo más que pudiera cubrirme. Y sin importarme lo hice y una vez abajo era tarde para arrepentirse.
Caminé velozmente hasta la casa de los Gallagher y la única luz encendida era la de la sala, lo cual me hizo sentir un poco de alivio, pues no habría ido en vano. Aunque continuaba pensando en lo raro que sería para ellos recibirme a las doce de la noche en medio de una torrencial lluvia.
Toqué la puerta, pero adentro se escuchaba un poco de música, así que toqué el timbre un par de veces; la música se detuvo y escuché unos pasos venir a la puerta y al abrirse, me recibió la única cara a la que estaba esperando: Noel.

Con una sorpresa indescriptible se quedó helado unos segundos para después reaccionar. Para ese punto me sentía ya un poco avergonzada por haber ido así, sin más.

-¿Sofía? ¿Qué demonios te sucede? ¿A caso quieres morirte?
-Noel yo...
-Pasa, te congelarás.- entré y cerró de un portazo, sin decir una palabra más me tomó del brazo y me llevó escaleras arriba al cuarto que parecía ser de su madre; abrió el ropero y sacó de él una toalla grande.
-¿Qué estás...?
-Toma, sécate. En seguida vuelvo.- salió y me quedé quieta por unos instantes al no entender qué hacía. Pronto me sequé el cabello, la cara y las manos.
-Toma, no es la ropa más linda, pero es cómoda y al menos está seca...
-Pero es tu ropa...-dije al tomarla.
-Ya lo sé Sofía, pretendo que te quites la ropa húmeda y te cambies para que no te enfermes...-él estaba extrañamente serio, incluso podría decir que estaba molesto.
-¿Por qué estás tan...?
-¿La quieres sí o no?
-Sí
-Bien. Tómate tu tiempo- salió sin darme oportunidad a más y cerró la puerta, escuché que bajó las escaleras y me sentía totalmente perdida.

Comencé a cambiarme y noté que incluso me había dado unos calzoncillos “bóxer” que aún estaban en el empaque. Así terminé vistiendo un pants gris holgado, con una playera blanca grande que tenía un estampado que decía “Strawberry fields”; calcé unas calcetas blancas de lana y me abrigué con una sudadera roja con blanco que tanto le gustaba a él y también a mí. El usarla me hacía bastante feliz.
Salí y fui al baño para lavarme la cara, pues mi maquillaje ya estaba un poco atrofiado; me lavé la cara y sequé un poco más mi cabello con la toalla mientras me miraba al espejo sintiéndome aún un poco ebria y extraña. Me peiné un poco y después de suspirar supe que era momento de volver a enfrentarme al extraño comportamiento de Noel.

-Gracias- dije tímidamente al encontrarlo en su habitación. Se levantó de la cama y me miró unos segundos aún con seriedad.
-Por nada
-La toalla la he puesto en el área de tend...
-Está bien, gracias.
-¿Por qué estás mo...?
-¿Por qué viniste Sofía?
-¿Perdón?
-¿Qué mierda te hizo pensar que salir de tu casa a esta hora en plena tormenta, era un momento indicado para venir?
-Puedo largarme en cualquier maldito momento... a decir verdad ni siquiera yo tengo idea de por qué vine. Y no es taba en mi casa...
-Oh eso lo sé...- respondió él con una sonrisa fingida y para ese punto no supe quién de los dos estaba más molesto.
-¿Cómo que lo sabes?- él sólo me miró, debatiendo en su mente si debía continuar con esa conversación o no; finalmente sentándose en su cama y sobando su rostro respondió:
-Olvídalo- Y mi furia creció, pues en ese momento en lugar de entender que él simplemente no quería discutir, yo lo tomé a mal gracias a mi estado de ebriedad.
-¿Olvidarlo? Vamos Gallagher, afróntalo
-Sofía... estás evidentemente ebria, no bastante, pero sí lo suficiente como para entrar en un estado de impertinencia que nos podría hacer explotar a los dos... Y no quiero.
-No puedes hacer eso Noel, soltar las cosas a medias...
-No tiene caso...
-Lo tiene. ¿Por qué lo dijiste?
-...
-¿Por qué Noel?- él bastante exasperado respondió, dejándome muda.
-Porque te vi con Damon ¿ok? Los vi hace unas horas...-en ese momento al alcohol se esfumó de mi cuerpo y yo quedé helada.
-Cómo que nos...
-Estaban tomando un café y pude verlos al volver del hospital, al parecer ambos pasaban un buen rato...-continuó mirando hacia el suelo  y yo me sentía totalmente desencajada.
-Noel...
-No intentes disculparte, no tienes que hacerlo. Yo soy quien está mal, tú tienes el derecho de salir con otras personas ya que no estás en una relación... es sólo que...
-¿Qué?
-Que te quiero demasiado y me es difícil aceptarlo, Sofía.- Él parecía derrotado por aceptar de ese modo sus sentimientos y yo estaba conmovida; éramos mayores y saber que después de tantos años aún guardábamos esos sentimientos mutuamente, me parecía un idilio complicado pero me hacía feliz saber que mis sentimientos eran correspondidos.

Me acerqué y lo miré tiernamente a los ojos, le sonreí y él continuaba medio derrotado.

-Tal vez ninguno de los entiende qué pasa con nuestra mente, pero al menos estamos acompañados.
-Siento haber sido un idiota hace un momento
-No estoy molesta Noel...- Y como no había momento para ninguna otra cosa, tomé su rostro delicadamente entre mis manos y acariciaba sus mejillas. Él me tomó de la cintura y llevó mi cuerpo hasta el suyo con fuerza, no podíamos huir el uno del otro y no queríamos hacerlo.
Acerqué lentamente mis labios a los suyos y comenzamos a besarnos, adentrándonos en un placer que hace tiempo no vivíamos, sin la timidez e inexperiencia que años atrás teníamos.

                   

Sofía es mi nuevo ejemplo a seguir, mis expectativas de vida están influidas por ella, tal como las expectativas de las niñas que crecieron viendo todas las películas de Disney JAJAJAJA.
Aproveché el tiempo para subir este capítulo que, según mi mente, no es tan extenso, pero sí que te dará mucho en qué pensar, oh sí. Te dije que cosas buenas se avecinaban.
Hasta la próxima actualización, Miss Roquet. Disfrute su embolia de sábado por la tarde jajajaja.


Comentarios

  1. ¡JAJAJAJAJAJAJAJA NOOOOO MAMAAAAAR!

    Me ultra cagué con todo... No mames quiero ser como Sofía cuando sea grande 😭😭😭😭 jajajajajaja eso es ser una campeona chingona vaya 👌🏽💃🏽

    Me pareció súper tierno el momento con Damon bajo la lluvia porque #romanticismo pero todo se fue a la gaver cuando cierto uniceja apareció en la mente de Sofichingona.

    Me mamó que por pinche impulso con ayuda del alcohol se haya lanzado a casa de los Gallagher y WEY que se echara al pinches Noel que estaba todo ardido JAJAJAJAJAJAJA.

    Mira, sabemos que soy una culera pero te juro que al término del capítulo cuando vi la foto de Damon y abajo la de Noel me dio un ataque de risa porque no mames jajajajaja o sea, Damon Don Pendejo y abajo Noel Uniceja ganón JAJAJAJAJAJAJAJA eso estuvo de lujo 👌🏽😂😂😂😂

    En fin, muchas gracias pot la actualización y mi merecidae embolia de sábado.

    Pd. Ya después de 21 capítulos por fin algo de acción que tanto anhelaba 💖

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